El objetivo esencial de este proyecto es, a través del blog, comprobar si la idea podría tener éxito. Es decir, crear el blog como una especie de laboratorio de ideas en la que confirmar o no si el trabajo puede ser exitoso. Sabemos que en un momento tan competitivo como el actual, en el que la comunicación está en manos de grandes grupos de comunicación, emprender un proyecto, por mucho que la idea sea buena, puede acabar eclipsado y socavado por múltiples razones. Por ello, deseamos comprobar, a través de una plataforma más amable con los emprendedores que nos permite arriesgar poco (especialmente en el terreno económico), si el medio sería capaz de alcanzar nuestro reto mayor: establecer un medio de comunicación sostenible en el que haya trabajadores y no esclavos. En pocas palabras, conseguir que en la revista se creen puestos de trabajo con un salario digno, con vistas a crecer y con un proyecto fundamentado en la ilusión de los involucrados.
En cuanto a la revista, el objetivo de la misma es, principalmente, hacer reír a los lectores que se acerquen a los artículos. Creemos que, aunque juega en nuestra contra el hecho de que sea una temática histórica, puede ser bastante fácil jugar con la absurdez del pasado y que todo el mundo puede entenderla con una educación básica. Pero no solo eso, sino que a través de esa sátira queremos destruir, o al menos hacer tambalearse, al discurso hegemónico de la historia. La visión de una historia única y verdadera es absurda desde la propia concepción de ciencia social de la misma y creemos que es bueno dar voz a aquellos que siempre la han tenido apagada. De igual modo, fomentaríamos el conocimiento histórico y del pasado, muy necesario, especialmente en nuestros días, donde no se puede entender el presente ni el futuro sin ella. Como bien dijo Cicerón: “Un pueblo que olvida su historia está condenado a repetirla”. En este sentido, creemos que está en nuestra humilde mano, inspirar a las nuevas generaciones la importancia del conocimiento en una especie de “aprender jugando”. La memoria es, además de selectiva, sentimental, por lo que estudiar determinados hechos de una manera divertida puede ser la mejor manera de inspirar a los jóvenes.
Otro de los objetivos esenciales del medio es conseguir transmitir una imagen de seriedad. Sabemos que el humor siempre va asociado, aunque sea algo injusto, a una imagen de escasa calidad. En ocasiones esto está justificado, pero en otras no, por lo que un objetivo primordial del medio va a ser romper con este prejuicio. Cada afirmación, cada sátira y cada chiste que hagamos estarán fundamentados en algo y nos aseguraremos de que nuestras fuentes estén debidamente expuestas y publicadas. Queremos trabajar como investigadores, pero escribir como humoristas, de tal modo que cada artículo estará muy bien documentado y basado en fuentes sólidas, de lo contrario no se publicará. Cada trabajo estará debidamente corregido y en el caso de cometer fallos, seremos conscientes de nuestro error, recularemos y pediremos disculpas por ello. Nunca buscaremos terceros culpables cuando no los haya ni impediremos dar la cara en el caso de sufrir presiones o chantajes, porque somos perfectamente conscientes de nuestra responsabilidad como periodistas. Solo así, conseguiremos transmitir una idea rompedora y transgresora que nos asocie con un aire de calidad y responsabilidad.
Además, aspiramos a demostrar que se puede hacer humor sin molestar a los grupos oprimidos pero sí a los opresores. Creemos que una comedia que se ríe y estereotipa a las minorías no es una comedia, sino una herramienta más de fomentar dicha discriminación. Pero al igual que no queremos fomentar estos prejuicios, tampoco queremos mostrarnos equidistantes o fríos ante ellos, y trataremos de derribar los mismos en la medida de lo posible, de una manera comprometida. Por eso, entre otras actuaciones, en nuestros artículos evitaremos el masculino genérico mediante la grafía (“x”), siendo perfectamente conscientes de la importancia del leguaje a la hora de crear comunidad y progreso.
Por último, seremos plenamente trasparentes, no solo con nuestras fuentes y errores, sino también con nuestras cuentas. Lo haremos tanto con nuestros suscriptores como con aquellos que simplemente deseen conocerlas sin nunca haber leído nada. Este es un compromiso que nos ayudará a la hora de destruir posibles presiones y para fomentar la motivación de los lectores, para ayudarles a sentir que importan, que son imprescindibles.
Estos objetivos son demandas sociales que van en la línea del medio, que además de proteger a los oprimidos y criticar la versión hegemónica de los opresores, siempre estará comprometida con el cambio y con los clamores populares que surjan en un futuro. Es decir, el medio se compromete a no estar nunca obsoleto ni convertirse en una vieja gloria anticuada, y para ello confiaremos siempre en el espíritu de la juventud, encargada de hacer avanzar a la sociedad.
Iñaki I El Espectacular
Salseos Históricos 